domingo, 25 de mayo de 2014
Carnicero del deseo.
Corro y recorro su piel,
desgarro sus latidos en una noche fría,
la luz de la luna y su despertar,
sangre fluyendo en las calles de una ciudad oscura
donde los espectadores se callan,
donde habitan marañas.
Una pausa y el sudor de mis manos delatan
al carnicero del deseo, la píldora del enfermo,
el demonio liberado en los pasadizos eternos...
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Caídas
La noche va cayendo, Viene el viento y murmura sonidos, Y en la distancia, vamos cayendo… Caemos… sin reparo, Como vacas hacia ...
-
A escondidas del mundo y de la vida, en los lazos de los años, Vuelvo al mar de tus suaves caricias, Anclo el alma con cálidos abra...
-
La vida consiente, vulgar e impaciente, La vida que estallas con chispa y con huellas, Asilo de suerte, sin patria ni vientre, Temor...
-
En algún tiempo destinado al fracaso pero muy oportuno para detallar, habitaban personas de espesa barba y grandes cinturones de cuero, c...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario